¿Sabés qué es el aura de las personas?
“Es por medio del aura, que llegamos a conocer nuestro verdadero estado interno”.
¿Qué es el aura de las personas? Es ni más ni menos que el principio energético que todas las personas tenemos desde el mismo momento en el que llegamos al mundo y se queda con nosotros hasta que partimos y además es el campo electromagnético o luz radiante que nos envuelve y sale de adentro, influenciada por cómo nos sentimos y estamos. Para la espiritualidad, es una porción esencial por descubrir del propio conocimiento. El color del aura es único por ser y denota el cómo los otros nos perciben y como lo hacemos nosotros.
En términos de estudio, se amplía hasta cerca de un metro de trayecto del físico de cada uno en diversas vías, abrazándonos inequívocamente.
Inapreciable a la visual humana y fenómeno nada común, el aura es la unión de la entidad volátil, emocional y corporal, así como los datos que traemos del alma?, y se alía a los 7 chackras. Es que el aura está compuesta por 7 capas sutiles que se mezclan entre sí e influyen una con otra y transmiten valiosa información.
¿Es posible conocer el campo de energía personal y el de los demás?
Sí. Más de una vez habrás visto u oído que ciertas personas pueden experimentarlo. En verdad, no es nada complicado hacerlo. Existen ciertas técnicas que permiten saber qué muestra el aura, aun cuando no sea visible ante todos. Quienes desarrollan esta capacidad psíquica única, no tienen inconveniente en lograrlo. Se suele decir que los pequeños pueden ver el aura naturalmente, algo que con el paso del tiempo pierden.
En este artículo del post te enseñamos a identificarlo en la comodidad de casa.
Empezá por colocar un espejo cerca del piso en un horario nocturno, sin luz de día. Luego, procede a prender una vela blanca y colocarla delante. Ahora apagá la luz artificial y sentate en posición recta a meditar cerca de 10 minutos sin perder de vista la luz de la llama. Esta es la forma en la que sentirás por sobre tu cabeza tu aura personal.
Algunas personas dicen llegar a ver además el color. Puedas o no, estarás percibiendo tu luz. Ahora deberás colocar tus manos unidas con los dedos erguidos sobre tu cuello, y al minuto empezarás a desunirlas muy suave. Lo que notarás es una impresión sin explicación en la que notarás más temperatura entorno a vos y una energía muy fuerte entre tus palmas.
Para lograr verla en los otros, será preciso solo que te asientes en un espacio oscuro junto con aquel que quiera descubrir la suya. Esta persona tiene que estar delante con iluminación de fondo, allí comenzará a notar su aura sobre la corona.
Existe otra manera que trata de colocarse de pie bien cerca de una pared blanca, hacer un punto pequeño al nivel de los ojos y mirar hacia este, con la nariz apoyada sobre el muro. Respirar hondo y relajarse fijando los sentidos al punto. En cuestión de minutos es posible ver el reflejo del aura.
¿Qué nos muestra el aura?
Al estar inmersos en este cosmos infinito, sabemos que el aura no puede ser otra cosa que vibración. De esta manera, absolutamente cada sensación, vivencia y pensamiento se manifiesta en nuestra aura, y en esta línea, el alma de cada uno irradia fulgor y cautiva el de los otros y el aire en una simbiosis casi perfecta.
Como explican los especialistas en este estudio, el aura no es inamovible. Varía según las situaciones que se viven, el propio crecimiento y las épocas. Y además, es posible modificarla con el propósito y con la práctica de la visualización, ceremonias personales que ayudan a purificar y aplicación de perfumes en la terapia. Esta última técnica posibilita el cambio de frecuencia del aura o de los chackras que no vibran armónico, ganando bienestar psicofísico, pensándolo integralmente. Así, el interesado puede atraer cosas más buenas y exponer una energía mejor.
Esto se debe a que las emociones accionan sobre el sistema nervioso, generando la elevación o caída de ciertos neurotransmisores.
Se ha probado que la terapia con perfumes emocionales como nuestra fragancia Luz Aura, sensoriales y aguas perfumadas, líneas majestuosas con aceites esenciales de olores estimulantes aliadas de la limpieza energética, propician la energía positiva, refuerzan el aura, protegen y elevan las defensas y revelan la luz que cada uno lleva dentro, siendo perfectas para recuperar bienestar, a modo de escudo.
El aura unida a los aromas revela iluminación angelical, derribando antiguos esquemas en pos de lo nuevo.
A su vez, el aura puede llegar a ser un espejo de lo que nos pasa por dentro. De ahí, que se concluya que puede expresar si se padecen malestares.
El tono que cada aura presente, simboliza la esencia misma de ese ser y sus designios en esta vida. También, muestra su carácter y cuánto posee.
Es posible que cuando decimos sentir acercamiento innato con alguien o por el contrario, rechazo. Se trate de las auras, porque atraen o repelen energías positivas y negativas en función de cómo esta esté.
Quien toma la terapia del aura puede alcanzar:
Una mirada renovada sobre los problemas que se le presentan
Tratarse y sentirse mejor con él mismo
Poner en eje los sentimientos y la mente
Los principales colores del aura y qué significan:
Azul: este tono habla de seres positivos, frescos y tranquilos. Esos que llevan la confianza propia adelante. Espirituales. Si se ven tenues, puede significar depresión.
Violeta: habla de la parte espiritual engrandecida y de amor. Personas hábiles y enfocadas. Vitales.
Rosa: este color es propio de aquellos que adoran lo místico, son empáticas y cariñosas. Delicados. Si es más oscuro, puede marcar falta de madurez.
Rojo: retrata a personas intensas y pasionales. Suelen liderar y ver con positivismo los hechos. Fuertes. Ególatras. Impetuosos y valientes.
Amarillo: es un tono propio de los creativos y positivos. Muestran inteligencia, triunfan y sobresalen.
Bronce: son seres que se muestran y actúan con nobleza. Al punto de llegar a verse como algo inocentes. No tienen maldad.
Naranja: es el aura de aquellos seres amables, enérgicos y positivos. Si se divisa más oscuro, puede denotar egoísmo.
Verde: refiere a un color de confianza, calma y salud. Es muy agradable. Ego. Si es denso, puede hablar de falta de seguridad.
Blanco: personas de enorme espiritualidad, pureza y paz. La verdad por delante. Ideales y valores claros.
Índigo: empáticos y cordiales. Se ponen en el lugar ajeno. Puede ser alguien que trate de manipular.
Dorado: este tono emana de seres con objetivos altos. Puede ser muy autoexigente. Líder que muestra el camino. Protector.
Plateado: son de gran cerebro, pero caen en el idealismo con facilidad. Al no impulsarse fácil, pueden padecer inconvenientes unidos a la salud. se ven fríos. Tradicionales.
La ausencia de color denota malos pensamientos, ansiedad, angustia, discrepancias y caracteres frívolos y cansadores. Mal karma.
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